En el mundo de los festivales de música contemporánea –afortunadamente cada vez más nutrido de propuestas- las definiciones cada vez adquieren una importancia mayor. El Festival SMASH, que ahora llega a su cuarta edición, nos propone un acercamiento a la música de nuestro tiempo sin perder de vista la observación y el conocimiento. En la complejidad de nuestro mundo actual y de la propia música –en la que conviven multitud de visiones estéticas- parece conveniente ir más allá del concierto y complementar los ciclos con otras iniciativas. Por ejemplo, en este IV Festival SMASH –que se celebra del 28 de octubre al 1 de noviembre en distintos espacios de la ciudad de Salamanca- podremos asistir a las conferencias de los compositores Alberto Hortigüela, Manel Ribera y José Luis Torá, un concierto-taller donde se trabajarán obras de David Aquino, Fernando Egido, Germán Moreno y Alberto Hortigüela, o un concierto pedagógico donde los niños podrán componer una breve obra musical que será interpretada durante el posterior concierto. En el capítulo de los conciertos, podremos escuchar al veterano Grup Instrumental de València –que interpretará obras de Elliot Carter, Jesús Torres, Mauricio Sotelo, Jesús Ruega, Luis Tinoco y Miguel Gálvez Taroncher-, el recital del percusionista Sisco Aparici –con obras de Brendan Colbert, Toshio Hosokawa, Brian Ferneyhough, José Minguillón, Iannis Xenakis y la composición con vídeo de Ross Karre’s/Jeffrey Treviño- y al propio SMASH Ensemble interpretando los dos últimos conciertos. El último de ellos incluye los dos estrenos del festival: for(UN)F/ALL>>>>talking twenty thousand languages to nemo –de la compositora polaca Jagoda Szmytka- y New quintet -del recientemente finalista del Concurso Internacional de Composición Auditorio Nacional-BBVA, el argentino José Luis Campana.
Cabe destacar, por el interés que nos suscita la investigación sobre las relaciones de las artes, la conferencia que Alberto Hortigüela dará el día en en la Hospedería Fonseca de la Universidad de Salamanca, donde el compositor abordará algunas de sus obras, atendiendo especialmente a la manera de trabajar a partir de textos literarios, bien en obras con voz o sin ella, así como de otras composiciones que relacionan música y palabra, como Das Mädchen mit den Schwefelhölzern, de Helmut Lachenmann y y Cuatro Citas de Juan Goytisolo, de Manuel Hidalgo.
Para profundizar un poco más en el trabajo que SMASH desarrolla, hemos hablado con su director artístico Bertrand Chavarría-Aldrete, que nos aporta su visión en la siguiente entrevista:
Habéis titulado este IV Festival SMASH como “La Résistance”, por lo que vemos, en alusión a la crisis que está azotando todos los rincones, incluido –cómo se iba a librar- el de la cultura. ¿Hay alguna otra alusión “oculta” en este título? ¿Hablamos de otras “resistencias”, en el plano estético, quizá?
B.Ch-A.: Ambas ideas las queríamos reflejar en el título del Festival; la primera sin duda con referencia a la situación económica que se vive en el mundo entero, pero que también es la que vivimos desde que iniciamos el grupo y el festival. Paradójicamente, ésta edición será la primera vez que paguemos un caché a los músicos de SMASH en el festival: todos, desde la primera edición, han venido a tocar gratis con el interés de hacer algo bueno e interesante.
Con respecto a otras modalidades de resistencia claro que existen, y a todos los niveles, estéticos, personales y sobre todo musicales. SMASH siempre ha buscado mostrar aspectos del panorama musical que, de alguna forma, no tienen la presencia necesaria y esperada.
SMASH es una iniciativa muy ambiciosa, en la que tocáis palos muy diversos: el concierto, la educación, la relación con otras disciplinas… Por las características de Sul Ponticello este último punto nos interesa de forma especial. ¿Qué relación mantenéis con otras artes, las visuales, la literatura…? ¿Articuláis un debate en torno a lo multidisciplinar? ¿Pensáis que la relación de la música con otras disciplinas está dando un paso diferente en los últimos tiempos, que hay carencias o excesos de fascinación que conducen a mezclas fuera de toda coherencia…?
B.Ch-A.: No creo que existan carencias; creo que nuestra percepción, la del ser humano en la actualidad, está dañada por el entorno en el que nos desarrollamos; por esto, unir varias vertientes del arte ayuda en un concierto a mantener esa percepción cautivada (que no cautiva). Muchos compositores, sobre todo en la escuela francesa, han estudiado y tomado la percepción como equilibrio en el discurso musical.
Los excesos no me molestan, y menos aún si forman parte de una nueva forma de expresión o lenguaje personal. Sin embargo, las reproducciones o imitaciones de lo existente (como en muchas veces sucede con las nuevas tecnologías y multidisciplinas) hacen ver solamente las limitaciones del material y no su riqueza.
En vuestra “filosofía” hay un lugar especial para el aspecto pedagógico. En esta edición del festival presentáis, además del ciclo de conferencias, un concierto didáctico. ¿Cómo veis la situación actual en la educación musical? Acotando un poco más la pregunta para que no resulte inabarcable, ¿pensáis que existen vías para articular una pedagogía que tenga en cuenta la relación con la creación viva? Por ejemplo, en las artes plásticas se ha avanzado mucho en este terreno…
B.Ch-A.: Claro que existen, y ayudan muchísimo a gente con una visión poco definida de la música “clásica” o contemporánea. Por citar un ejemplo, el año pasado en el tercer festival realizamos el primer concierto pedagógico (dentro del festival), donde hicimos una coreografía del movimiento de las manos del pianista en Guero de Helmut Lachenmann; eso ayudó mucho a escuchar y apreciar la obra (que no es fácil), y estoy hablando de niños de todas las edades.
Además, en conjunto con nuestro técnico Grégoire Lorieux del IRCAM del París y el Conservatorio Profesional de Música de Salamanca, realizamos un par de obras pedagógicas con electrónica “live” con alumnos del centro y ayuda de los profesores (algunos también son solistas de SMASH ensemble), sin olvidar que tres niños de 8 años, alumnos de piano del conservatorio, interpretaron obras de Gérard Pesson y Ramón Lazkano. Lo cual resultó un gran éxito, ya que ver a niños o jóvenes realizando ése tipo de música, identifica y ayuda a que el auditor haga un esfuerzo a nivel de la percepción auditiva. Todo esto gratis, como dije antes.
Está claro que existen maneras de acercar la creación actual, y creo que SMASH tiene la cabeza para concretarlas, desarrollarlas y acercarlas a un cada vez mayor número de personas. Pero para todo esto, necesitamos el apoyo de las instituciones oficiales en España y del sector privado.
SMASH es un ensemble internacional por definición, formado por miembros de distintos países, como demuestra tu mención a Grégoire Lorieux. ¿Fue este aspecto un punto de partida en el origen de la formación? Es decir, ¿hay una idea de fondo en el proyecto que aluda a la necesidad del encuentro cultural, de visiones diferentes que converjan en intereses comunes…?
B.Ch-A.: Las diferentes culturas de cada uno de nosotros ayudan mucho. La labor del director artístico obliga a estar pendiente y a tener una enorme lista de obras y compositores. Pero un trabajo individual nunca se compara con el colectivo: muchos integrantes de SMASH me han dado a conocer muchos compositores e intérpretes muy interesantes. El último caso es el de Richard Craig, flautista del SMASH, que me envió una partitura de Jagoda Szmytka y fue así como la conocí y decidimos hacerle un encargo para una nueva obra.
La idea de unir a gente de diversos países se fue concretando con el tiempo. Antes de venir a Salamanca, trabajé con mucha gente fuera de España haciendo música contemporánea y, al iniciar la idea de SMASH en Salamanca, a todos ellos les interesó el poder acercarse a un repertorio innovador y “apolítico” (es decir, fuera de la política musical dirigida), que no se podía hacer en otro lado, siendo ésta, como anteriormente te comenté, la única motivación.
Además, unir músicos de Salamanca y otras partes de España con músicos extranjeros ha dado un excelente resultado musical y un rico intercambio de culturas: cuando hay un concierto de SMASH se hablan, al menos, ¡tres lenguas diferentes!
Precisamente, el hecho de que el festival se desarrolle en Salamanca, ciudad que mantiene una carga cultural importante, siempre condicionará de algún modo una actividad de este tipo. La presencia de la Universidad, de un conservatorio superior con proyectos vivos en torno a la música contemporánea, de un entorno monumental… ¿Qué relación mantiene SMASH con la ciudad y con sus instituciones? Vemos que habéis logrado un buen “cluster” de apoyos…
B.C-A: SMASH ensemble está en desventaja con los demás grupos de España. En una comunidad como la de Castilla y León no existen los apoyos que se dan en otras comunidades a la música y los músicos que realizan su labor en esa región. Por ejemplo, la Fundación Siglo de Valladolid no toma en cuenta iniciativas como la nuestra, desgraciadamente.
Sin embargo, la relación de SMASH con Salamanca está mejorando año tras año. La Universidad de Salamanca, por ejemplo, se ha convertido en un apoyo muy importante para nosotros.
En este momento estamos tratando de llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento de Salamanca para poder conseguir un mayor apoyo de su parte y poder así llenar el vacío que ya he comentado con la Fundación Siglo.
Aunque, si te digo la verdad, nos sentiríamos mejor respaldados con un apoyo mayor por parte de las instituciones oficiales a nivel nacional.
Pasando a lo estrictamente artístico, como todo festival que se precie, el que organizáis nos regalará dos estrenos absolutos, con obras de José Luis Campana (Buenos Aires, 1949) y Jagoda Szmytk (Legnica, Polonia, 1982). Ambas obras como cierre del ciclo, el domingo 1 de noviembre, e interpretadas por SMASH ensemble. ¿Nos puedes esbozar algo de estas obras? Dos quintetos –de diferente plantilla- de dos autores muy alejados geográfica y generacionalmente. ¿Se traduce esta distancia, en las obras que presentaréis, también en el plano estético?
B.Ch-A.: Las obras son extremadamente diferentes, así como sus personalidades. José Luis Campana cuenta con una fuerte formación “clásica” y una estética muy definida en los últimos años, basada en integrar la música de tradición oral en sus obras, lo que nos lleva a un mundo lleno de elementos sonoros reconocibles en su origen y en su posterior manipulación compositiva.
Jagoda Szmytka es, sin duda, una de las creadoras que más me han impactado en los últimos años; su tratamiento instrumental tiene una fuerte inclinación “concreta”, pero no por eso deja de ser un discurso muy original: su música cuestiona muchos parámetros establecidos en la sociedad y en la música.
Para terminar, retomando el punto inicial, la crisis. ¿Pensáis que está realmente afectando este problema a la infraestructura cultural española (vemos que los festivales, la creación, conciertos, logran sobrevivir…)? Con el poco dinero que se invierte en cultura en España –sobre todo en actividades que nunca serán masivas, como la música contemporánea- ¿creéis que se hacen perceptibles las dificultades económicas? Quizá el estar acostumbrados (mala costumbre) a no contar con ayudas suficientes, hace que resulte habitual buscar el dinero entre las piedras…
B.Ch-A.: Tampoco creo que en España exista poco dinero para la música contemporánea: tan sólo está, quizá, mal repartido. Las convocatorias que se han lanzado últimamente por parte del INAEM han resultado muy beneficiosas económicamente para algunos pero, sin duda, han tenido consecuencias para muchos otros: algunos grupos con varios años de trayectoria y realizando actividades interesantes no han logrado sobrevivir, y eso me parece muy grave; sin embargo, ha habido otros que, no teniendo verdadera presencia en el panorama musical español, han accedido a tales ayudas. Es, cuando menos, extraño.
España debe invertir en la música contemporánea pero de manera inteligente e intentando nuevas vías y estructuras ajenas al arribismo y la política.
Información
Los conciertos tendrán lugar en el Auditorio San Blas.
Cuesta de San Blas, s/n
37007 – Salamanca
El Ciclo de Conferencias se celebrará en la Hospedería Fonseca (Universidad de Salamanca).
C/ Fonseca 2 37002 Salamanca
Tel: 923 294 760 / Fax: 923 294 797
E-mail: hospederiafonseca@usal.es
Web: http://campus.usal.es/~residen/Hospederia/
Referencias
Etiquetas:Contemporánea, Ensemble, Entrevistas, Festivales, Música española, Política cultural, Universidad, Vídeo
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